Remedios caseros para taquicardias

Remedio 1) En primer lugar vertimos tres ranas de yerbabuena dentro de una taza de agua hirviendo.
Tapar y dejar refrescar.
Tomar una taza al día.


Remedio 2) En primer lugar vertimos varias hojas de lechuga en un cuarto de litro de agua que se encuentre hirviendo.
Tapar, colar y beber tres tazas al día.


Remedio 3) Hervimos por diez minutos una litro de agua que contenga dos cucharadas de milenrama, retama, y ruda.
Pasado ese tiempo, tapar y dejar refrescar. Filtrar y tomar una taza después del almuerzo y de la cena


Remedio 4) Lo primero que hay que hacer es Colocar un puñado de hojas secas de cedrón en un jarro de agua hirviendo.
Dejar reposar y tomar.
Repetir, por lo menos, dos veces diarias.


Remedio 5) Lo primero que hay que hacer es Preparar una infusión con una cuchara pequeña de flores secas o frescas de espino dentro de una taza de agua la cual debe hervimos por diez minutos.
Tomar dos veces al día.
Esta infusión ayuda a regularizar las pulsaciones del corazón, incrementa el poder del músculo cardiaco y baja la presión arterial.


Remedio 6) Lo primero que hay que hacer es Tomar agua destilada de las flores de mandarina, ya que tiene propiedades antiespasmódicas.


Remedio 7) Macerar una parte de muérdago por cinco de alcohol de 90?. Conservar en la nevera en un frasco con cierre hermético. aplicamos sobre el pecho mediante un paño mojado con esta preparación


Remedio 8) Mezclamos a partes iguales espliego, pasiflora y romero y extraer una cucharada.
vertimos dentro de una taza de agua hirviendo. Tomar. tres tazas al día con miel de azahar.
Este remedio resulta ideal en caso de la taquicardias causada por emociones fuertes.


Remedio 9) Para empezar Elaborar una infusión con una cuchara pequeña de valeriana seca dentro de una taza de agua la cual debe hervimos por diez minutos.
La valeriana no sólo tranquiliza a la persona sino también ayuda a regularizar el ritmo cardiaco.
Se toma una taza preferiblemente de noche.


Remedio 10) Para empezar vertimos una cuchara pequeña de polvo de semillas de apio dentro de una taza de agua hirviendo.
Tapar y dejar refrescar.
Tomar una taza al día de esta infusión.